E951 – Aspartame

Aditivo E951

Otros nombres del aditivo (sinónimos)

E 951, E-951

Información General

Aspartame (aditivo alimentario aditivo E951) es un edulcorante sintético no azucarado, ampliamente utilizado en la industria alimentaria como sustituto del azúcar.

El aspartame fue sintetizado por primera vez en 1965 por el químico James M. Schlatter. Unos años después, tras la realización de los estudios necesarios, fue aprobado para su uso en productos alimenticios. En 1981, el edulcorante comenzó a utilizarse en Estados Unidos y el Reino Unido y posteriormente se distribuyó a nivel mundial como alternativa al azúcar y al anteriormente popular sacarina, que había generado preocupaciones sobre su carcinogenicidad.

Químicamente, el aspartame es un éster metílico de un dipéptido compuesto por dos aminoácidos estándar: ácido aspártico y fenilalanina. La fórmula molecular de la sustancia es C14H18N2O5.

Las propiedades organolépticas del aspartame difieren del azúcar común: su dulzura se percibe más lentamente pero permanece más tiempo en la boca. El aditivo E951 no tiene olor, es fácilmente soluble en agua y es aproximadamente 200 veces más dulce que el azúcar. Su valor calórico es extremadamente bajo, ya que se utiliza una cantidad mínima del aditivo para alcanzar el nivel de dulzura deseado.

Una limitación importante del uso del aditivo E951 es su inestabilidad térmica: el aspartame se descompone a unos 80 °C, por lo que no se utiliza en productos sometidos a un tratamiento térmico intenso.

Efectos sobre el organismo

Beneficios del aditivo E951

Los aminoácidos en los que se descompone el aspartame en el organismo — fenilalanina y ácido aspártico — son componentes naturales de las proteínas necesarias para la salud humana.

La principal ventaja del aspartame es la posibilidad de consumir alimentos dulces sin aumentar significativamente la ingesta calórica. Esto es especialmente importante para personas que buscan perder peso o limitar el consumo de azúcar en casos de diabetes y síndrome metabólico. Gracias a su alta dulzura, el aditivo E951 permite reducir significativamente la carga sobre el metabolismo de los carbohidratos.

Daños del aditivo E951

El metabolismo del aditivo E951 produce una pequeña cantidad de metanol, que es una sustancia tóxica. Sin embargo, en estas dosis no representa un peligro para los humanos. La contribución del aspartame al nivel total de metanol no supera el 10 %, lo cual se considera seguro para el organismo.

El principal factor de riesgo al consumir el aditivo E951 es la fenilalanina, que se forma durante su descomposición. Para personas sanas, esto no representa un problema, pero para individuos con la rara enfermedad hereditaria fenilcetonuria (PKU), incluso pequeñas cantidades de este aminoácido pueden ser peligrosas. Por ello, en muchos países, los productos que contienen el aditivo E951 deben llevar obligatoriamente una etiqueta que indique la presencia de fenilalanina.

La literatura científica contiene abundante información sobre la seguridad del aditivo E951. Los estudios toxicológicos han demostrado una toxicidad aguda y crónica extremadamente baja. No se ha identificado potencial genotóxico ni mutagénico. Los experimentos a largo plazo en ratas y ratones tampoco han confirmado efectos carcinogénicos.

Sin embargo, algunas publicaciones, principalmente estudios del Fondo Ramazzini de Italia, generaron debate, ya que informaban sobre un aumento de la frecuencia de linfomas y leucemias en ratas. EFSA y otros organismos expertos consideraron cuestionable la metodología de estos estudios y no modificaron las conclusiones existentes.

Grandes estudios de cohorte, como el NutriNet-Santé francés (2022), encontraron una asociación entre el alto consumo de edulcorantes artificiales, incluido el aditivo E951, y un mayor riesgo de ciertos tipos de cáncer. Sin embargo, los autores destacaron las limitaciones de los datos observacionales y la imposibilidad de excluir factores de confusión.

Estos resultados se consideraron “señales”, pero no sirvieron de base para revisar las normativas.

En 2023, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC, OMS) clasificó al aditivo E951 como “posiblemente carcinogénico para los humanos” (Grupo 2B), citando datos humanos limitados y resultados contradictorios de algunos estudios.

Paralelamente, el Comité Conjunto de Expertos en Aditivos Alimentarios de FAO/OMS (JECFA) confirmó la ingesta diaria aceptable (ADI) de hasta 40 mg por kilogramo de peso corporal por día.

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) también realizó una revisión y concluyó que el consumo del aditivo E951 dentro de la ADI de 40 mg/kg de peso corporal por día es seguro para todos los grupos de población, excepto para los pacientes con fenilcetonuria.

Por lo tanto, el consenso científico de los organismos expertos indica que el aditivo E951 no representa un peligro para las personas sanas cuando se consume dentro de los límites recomendados, y el riesgo está limitado únicamente a la fenilalanina en pacientes con fenilcetonuria.

Usos

El aditivo E951 se utiliza principalmente en productos bajos en calorías y dietéticos. Se puede encontrar en refrescos carbonatados, chicles, caramelos, productos de confitería, postres y algunos productos lácteos.

Gracias a su alta intensidad de dulzura y a la ausencia de regusto, el aditivo E951 se combina a menudo con otros edulcorantes para crear perfiles de sabor similares al azúcar.

Una característica notable del uso del aditivo E951 es su limitada estabilidad al calor. A diferencia de acesulfame K o sucralosa, el aditivo E951 no es adecuado para hornear o preparar platos calientes y, por lo tanto, se utiliza principalmente en bebidas y postres fríos.

Estado legal

El aditivo E951 está aprobado para su uso en la industria alimentaria en la mayoría de los países del mundo, incluidos la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Japón, Australia y Ucrania.

En la UE, se regula en el marco del Reglamento nº 1333/2008 y se incluye en las especificaciones del Reglamento nº 231/2012. La ingesta diaria aceptable (ADI) se establece en 40 mg/kg de peso corporal.

En Estados Unidos y Canadá, el valor equivalente es de 50 mg/kg de peso corporal. En Estados Unidos, el aditivo E951 tiene estatus GRAS (Generally Recognized As Safe), lo que significa que se reconoce como seguro para su uso en alimentos cuando se consume de acuerdo con las pautas establecidas por la FDA.

Los productos que contienen el aditivo E951 deben incluir obligatoriamente un etiquetado sobre su presencia, así como una advertencia sobre la fenilalanina. Este requisito se aplica en todos los países donde se utiliza oficialmente el aditivo E951.

A pesar de los debates científicos en curso, como la clasificación de la IARC, los organismos reguladores — EFSA, JECFA y FDA — confirman la seguridad del aditivo E951 cuando se consume dentro de los límites establecidos.