La Agencia de Normas Alimentarias del Reino Unido (FSA), tras analizar estudios recientes realizados por la Universidad de Southampton, recomienda a los fabricantes que dejen de usar ciertos colorantes.
En el comunicado de prensa de la Universidad de Southampton se indica que los estudios recientes realizados por los investigadores demuestran que consumir alimentos que contienen ciertos colorantes sintéticos aumenta la hiperactividad en los niños.
En el estudio se incluyeron los siguientes colorantes: E102, E104, E110, E122, E124 y E129. También estaban presentes en los productos benzoato de sodio (aditivo alimentario E211), pero los científicos no relacionan el aumento de la hiperactividad con este compuesto.
El estudio fue financiado por la Agencia de Normas Alimentarias del Reino Unido (FSA). Participaron 153 niños de tres años y 144 niños de ocho años. Los niños fueron seleccionados al azar de la población general de Southampton y representaban un espectro completo de comportamientos, desde normales hasta hiperactivos. A la mitad de los niños se les dio diariamente durante seis semanas bebidas que contenían colorantes y benzoato de sodio. El otro grupo consumió jugos de frutas.
Los niños que consumieron bebidas con colorantes mostraron un aumento significativo en niveles de hiperactividad. Estaban más activos, impulsivos e inattentos. Este estudio replicó y amplió una investigación previa similar encargada por la FSA. El grupo de investigación usó observaciones propias, así como informes de profesores y padres. Ni los profesores, ni los padres ni los niños sabían a qué grupo pertenecían ni qué estaban bebiendo.
Tras analizar los resultados, la FSA realizó una reunión con representantes de la industria alimentaria del Reino Unido para discutir los hallazgos y recomendar a los fabricantes que dejen de usar los colorantes indicados en la industria alimentaria.
A los padres que tienen hijos con niveles elevados de hiperactividad, la FSA les recomienda eliminar de la dieta los productos que contienen los colorantes: E102, E104, E110, E122, E124, E129. Sin embargo, no deben pensar que eliminar estos aditivos evitará completamente el trastorno hiperactivo del niño. Muchos otros factores, como la herencia y la educación, también pueden influir en la hiperactividad.